Adicción al cannabis

A pesar de que el consumo de cannabis está ampliamente extendido en España desde hace décadas, también es cierto que la visibilidad de su consumo parece haber aumentado notablemente los últimos años. La aparición de los Grow Shops primero, y de las Asociaciones de consumidores después, ha facilitado enormemente el acceso a esta droga antes ilegal, ahora de consumo regulado.

Los estudios realizados confirman un notable aumento del consumo problemático de esta droga, además, también se confirma una importante progresión al alza de la concentración de THC (sustancia psicoactiva) en el cannabis consumido que se ha triplicado en los últimos diez años (OEDA, 2022).

Eso significa que lo que hace décadas se consideraba una “droga blanda”, hace ya tiempo que ha dejado de serlo, para convertirse en una de las drogas que más demanda de tratamiento provoca en España debido a las consecuencias adversas de su consumo.

Quien no haya consumido nunca esta droga posiblemente se preguntará el porqué de tanto interés por su consumo, especialmente entre los adolescentes.

¿Cuáles son los efectos de los porros?

Los efectos esperados más señalados por sus consumidores son la sensación de relajación, y la sensación de euforia que conlleva un aumento de la risa, también es habitual que el consumo de cannabis provoque una intensificación de la experiencia sensorial o incluso una alteración de la percepción que puede ser vivido como algo divertido y fascinante.

Otros efectos producidos por el consumo, y a su vez observables son el enrojecimiento ocular, la sequedad de boca, las alteraciones en el apetito, o la somnolencia (PNSD, 2023).

 Los efectos descritos son los habituales en los primeros episodios de consumo, sin embargo, a medida que el consumo pasa a convertirse en algo habitual, el consumidor debe aumentar la dosis debido a la tolerancia y los efectos placenteros van disminuyendo paulatinamente, para dar paso a la aparición de toda una serie de efectos no deseados.

¿Qué consecuencias tiene fumar porros a diario?

El consumo habitual de cannabis provoca:

• Alteraciones en la memoria.
• Dificultades para la concentración.
• Crisis de angustia.
• Fenómenos de despersonalización.
• Síntomas depresivos.
• Síndrome amotivacional.
• Ideas delirantes.
• Episodios psicóticos.

Cuando atendemos casos de consumidores de cannabis que piden ayuda, el perfil más habitual que nos encontramos es el de alguien joven o muy joven, que empezó con un consumo esporádico entre amigos en ambientes lúdicos, pero que fue dando el paso hacia un consumo habitual, posiblemente diario. Al poco tiempo empezó a sufrir problemas con la memoria, la concentración y el aprendizaje, lo cual provocó un importante descenso de su rendimiento académico, quizás incluso el abandono escolar. A pesar de que perseguía la relajación mediante el consumo, este acabó generándole crisis de ansiedad, cambios repentinos de humor, seguidos de estados apáticos y depresivos. Finalmente, se acomodó en la situación conocida como “síndrome amotivacional”, es decir, perdió completamente la motivación y la capacidad de esfuerzo para cualquier cosa que no fuera el consumo.

También resulta habitual recibir peticiones de ayuda de personas que a raíz de su consumo de cannabis empezaron a tener ideas delirantes (paranoias) y que finalmente sufrieron algún episodio psicótico en que su juicio de la realidad se vio completamente alterado.

Actúa contra la adicción al Cánnabis

Reconducir estas consecuencias graves del consumo de porros pasa por realizar un tratamiento que nos ayude a mantener la abstinencia, condición que permitirá al paciente reconstruir su itinerario vital de una forma mas sana, gratificante, y alejada de las dinámicas tóxicas de antes.

Si tenéis dudas sobre vuestro consumo o el de algún familiar, en ACTUA Psicoterapia ofrecemos una visita de orientación con un profesional experto en la adicción al cannabis, en la que valoraremos el caso y explicaremos las opciones de tratamiento que resulten más adecuadas.